La siguiente oración, compartida en varios sitios y adaptada*, pretende desagraviar a Jesús Eucaristía por los sacrilegios que se cometen a diario contra Él, presente en el Santísimo Sacramento. Puede ser rezada todos los días y a cualquier hora, cambiando, cuando sea necesario, el género y/o el número gramaticales.
Contribuyamos a su difusión en estos tiempos de escarnio y de odio generalizado hacia lo sagrado:
"Padre Eterno, en el nombre de Jesús, tu amadísimo Hijo, permíteme comulgar espiritualmente todas las Hostias recibidas en estado de pecado mortal o robadas para ser profanadas, que antes de que sean tocadas estas Hostias, pueda comulgar espiritualmente tu Cuerpo Sacratísimo y tu Sangre Bendita, sabiendo que estás vivo y presente en cada una de ellas.
¡Señor, dígnate venir al refugio de mi corazón!
Esta morada es indigna, pero se vuelve digna si mi Dios la visita. Con tu perdón deseo abrazarte; en tu abrazo deseo besarte; con tu beso, amarte; con tu amor, adorarte, y después, depositarte en los brazos de tu Madre Santísima, para que Ella desagravie, repare, adore y bendiga
tu Corazón, herido por la ingratitud del hombre.
Y cuando estas Hostias sean profanadas, Señor, Tú perdones tales sacrilegios y aceptes, a la vez, la humilde ofrenda de desagravio, que te tributo en el refugio de mi corazón.
Permíteme comulgar todas esas Hostias,
en todos los tiempos, pasados, presentes y futuros, hasta la consumación de los tiempos.
Amén.
Aclaración:
*La adaptación se debe a que, en una afirmación de deseo, presente en la oración original, se pide que Jesús no esté presente en las Hostias cuando sean profanadas. Esto es imposible por el hecho de que, si por un lado es cierto que solamente Dios puede, por medio del sacerdote, obrar el Milagro de la Transubstanciación, por el otro, es igualmente verdadero que no existe en el mundo palabra o poder que pueda lograr que Jesús deje de estar presente en una Hostia consagrada, aun cuando esta vaya a ser profanada.
31 de octubre de 2020, sábado de la semana XXX del Tiempo Ordinario.
Entrada publicada en desagravio a Dios por nuestros sacrilegios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario