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jueves, 31 de mayo de 2018

Visitación de la Santísima Virgen María: himnos litúrgicos




Cada 31 de mayo, el Calendario universal celebra la fiesta de la Visitación de la Santísima Virgen María. Estos son los himnos litúrgicos propios en español:

 
Oficio de lectura

María subió a la montaña,
y en ella subió el Señor;
supo Isabel el misterio,
y Juan exultó a su voz.

El lucero aún no nacía
ni había aparecido el Sol;
no hablaba aún la Palabra
y el Pregonero exultó.

Los vecinos, asombrados
y mudos de admiración,
vieron llegar por María
la Buena Nueva de Dios. Amén.



Laudes

Y salta el pequeño Juan
en el seno de Isabel.
Duerme en el tuyo Jesús.
Todos se salvan por Él.

Cuando el ángel se alejó,
María salió al camino.
Dios ya estaba entre los hombres.
¿Cómo tenerlo escondido?

Ya la semilla de Dios
crecía en su blando seno.
Y un apóstol no es apóstol
si no es también mensajero.

Llevaba a Dios en su entraña
como una preeucaristía.
¡Ah, qué procesión del Corpus
la que se inició aquel día!

Y,  al saludar a su prima ,
Juan en el seno saltó.
Que Jesús tenía prisa
de empezar su salvación.

Desde entonces, quien te mira
siente el corazón saltar.
Sigue salvando, Señor,
a quien te logre encontrar. Amén.


O bien:


La Virgen Santa, grávida del Verbo,
en alas del Espíritu camina;
la Madre que llevaba la Palabra,
de amor movida, sale de visita.

Y sienten las montañas silenciosas,
y el mundo entero en sus entrañas vivas,
que al paso de la Virgen ha llegado
el anunciado gozo del Mesías.

Alborozado Juan por su Señor,
en el seno, feliz se regocija,
y por nosotros rinde el homenaje
y al Hijo Santo da la bienvenida.

Bendito en la morada sempiterna
Aquel que tú llevaste, Peregrina,
Aquel que, con el Padre y el Espíritu,
al bendecirte a ti nos bendecía. Amén.



Vísperas:
(como en laudes)


31 de mayo de 2018, fiesta de la Visitación de la Santísima Virgen. Entrada dedicada a Nuestra Señora de la Visitación.

miércoles, 30 de mayo de 2018

Guion: Visitación de la Santísima Virgen María


Icono de la Visitación... - Meditación del Nombre de Jesús | Facebook


 
Formulario de Misa: aquí.


Introducción

Celebramos en este día la fiesta de la Visitación de la Bienaventurada Virgen María a su prima santa Isabel. La liturgia de la Iglesia nos invita a meditar sobre este significativo hecho bíblico, que la piedad cristiana contempla habitualmente en el segundo misterio gozoso del Rosario.

María, Aurora de los tiempos nuevos, es portadora del Mesías de Israel, que llega al mundo como Salvador de todos los pueblos y de cada generación.

La Virgen, Hija de Sion, como hizo con Isabel, también hoy, al igual que ayer, visita a la humanidad, y quiere acercarnos a todos al Señor Jesucristo, el único Salvador.


Liturgia de la Palabra

Primera lectura: Sof. 3, 14-18

La Virgen Santa María es la mística Hija de Sion, que hace presente al Mesías en medio de las naciones.

O bien: Rom. 12, 9-16b 

La vida de María, compendio de todas las virtudes, es magistralmente caracterizada en la siguiente carta paulina.

Donde la Visitación se celebra con el grado de "solemnidad", las dos lecturas precedentes son obligatorias.

Evangelio: Lc. 1, 39 56

La Santísima Virgen, con amor materno, también hoy visita "sin demora" al hombre sediento de Dios, y le ofrece, como a Isabel, el Fruto precioso de su seno inmaculado: Jesús de Nazaret.


Oración de los fieles

Las siguientes preces, con las necesarias adaptaciones, están tomadas de la Santa Misa en la fiesta de la Visitación de la Virgen María, presidida por el Papa Francisco el 31 de mayo de 2019 en la Catedral Católica de San José, en Bucarest (Rumanía):

 
Queridos hermanos, pidamos al Padre la gracia que brota de la Pascua del Señor Jesús:

R. Escúchanos, Señor.

-Padre, concede al Papa N, a los obispos y sacerdotes, fe sólida y pasión apostólica; que como María, Arca de la Nueva Alianza, conduzcan a todos a Jesús. R.

-Padre, colma de tu insondable sabiduría a los gobernantes, a los jueces y legisladores; que como María, Espejo de justicia, aprendan de Ti a servir y a ser justos. R.

-Padre, renueva en todos los bautizados la adhesión a Jesús, único Maestro y Señor; que con María e Isabel, canten a una sola voz tu misericordia. R.

-Padre, en tu providencia guarda y socorre a los pobres y sufrientes; que como María, Virgen humilde, tengan la certeza de que Tú colmas de bienes a los hambrientos. R.

-Padre, en tu gracia reúne a los pecadores y convierte sus corazones; que como María, Virgen de la confianza, crean en tu fidelidad paternal que ensalza a los humildes. R.

-Padre, reaviva en todos los pueblos la esperanza en un futuro de prosperidad y paz; que con María y José, y con Zacarías e Isabel, reconozcan y proclamen las grandes cosas que siempre haces por tus hijos. R.

Oración conclusiva


"Escucha, Padre, la voz de la Iglesia, que en comunión con María, invoca el don del Espíritu del 
Señor Resucitado, que vive y reina por los siglos de los siglos. Amén."

 
O bien:

Las siguientes preces, con las necesarias adaptaciones, son las que se emplearon en la Santa Misa de Apertura de la XXXVIII Jornada Mundial de la Juventud, presidida por el cardenal José Clemente, en Lisboa, Portugal, el 1° de agosto de 2023:

Hermanos, pidamos a Dios Padre todopoderoso, que dio a la Virgen María, la plenitud de la gracia, que haga partícipe de esta riqueza a la Iglesia y a toda la humanidad:

R. Señor, ten piedad

-Por la Santa Iglesia, para que reconozca en María el modelo del discípulo fiel y obediente que tiene la valentía de dejar todo y salir al encuentro del prójimo. R.

-Por el Papa N y por todos aquellos que son llamados a anunciar el Evangelio, para que, como María, lleven la Palabra de Dios al mundo con alegría, en especial a las personas más pobres y que se sienten solas. R.

-Por todos los líderes y autoridades del mundo, para que, como María, no busquen la gloria para sí mismos, sino que cumplan su misión con justicia y humildad, buscando el bien
para toda las personas. R.

-Por todos aquellos que están enfermos, desempleados y los que se sienten abandonados, para que el Señor, por intercesión de María, los consuele y fortalezca a fin de que se levanten e inicien de nuevo. R.

-Por la paz en el mundo y por el fin de las guerras, para que el Señor proteja a los inocentes e indefensos y para que acaben los conflictos. Que a ejemplo de María, vivamos en comunión fraterna y seamos inundados por la paz de Cristo. R.

-Por las futuras generaciones, que experimenten un encuentro con Cristo, fortaleciendo la fraternidad, más allá de las fronteras. Que se levanten y anuncien el Evangelio con alegría, a semejanza de María. R.

-Por todos los jóvenes del mundo, para que, en cada momento de sus vidas, especialmente aquellos que luchan con tristeza, ansiedad o desánimo, sepan salir de prisa como la Virgen Maria, portadora de la esperanza que hay en Cristo. R.

Oración conclusiva

"Dios eterno y omnipotente que hiciste grandes maravillas en la Virgen María, por su intercesión, renueva tus maravillas, para que podamos bendecirte y alabar tu nombre para siempre. Por Cristo, nuestro Señor".

O bien:

En esta fiesta de la caridad de María, presentemos a Dios nuestras necesidades a la vez que, con santa Isabel, san Zacarías y todas las generaciones, alabamos a la Madre y al Hijo de las promesas:

R. ¡Bendito sea el Fruto del vientre de María!

-Porque Jesús fundó la Iglesia y le rogamos que la proteja de toda adversidad, proclamamos. R.

-Porque Jesús eligió como Vicario suyo a Pedro y  queremos que ilumine las decisiones del Papa N, su actual Sucesor, proclamamos. R.

-Porque Jesús quiso dejarnos a su Madre como nuestra, y pedimos que nos enseñe a amarla cada día más, proclamamos. R.

-Porque Jesús deseó que el amor de María se manifestara en las numerosas apariciones en las que esta Madre sigue diciéndonos: "Hagan lo que Él les diga", y anhelamos responder a esta exhortación, proclamamos. R.

-Porque Jesús, al darse a nosotros como Pan, nos hace experimentar el gozo de la Madre que Lo engendró, y deseamos poder imitarla en su actitud de alegre servicio y entrega generosa, proclamamos. R.

Oración conclusiva

"Padre fiel y compasivo, haz que experimentemos constantemente en nuestro corazón el gozo de la visita de la Virgen de la caridad y el servicio, porque ella siempre nos trae a Jesucristo, tu Hijo y nuestro Señor, que vive y reina por los siglos de los siglos. Amén".


Ofertorio

Mientras pedimos las virtudes de caridad y humildad de María, ofrecemos los dones eucarísticos de pan y vino, necesarios para que el Salvador siga visitando a su pueblo.


Existe un formulario completo, (con Prefacio propio incluido), del misterio de la Visitación de María que puede encontrarse en el libro litúrgico "Misas de la Virgen".


Comunión

El mismo Redentor que María llevó en su seno virginal a casa de Zacarías e Isabel y que hizo que el Precursor Juan fuera santificado en el vientre materno, es el que viene a nosotros como Pan celestial en este exilio terrenal.


Puede emplearse alguna de las Bendiciones Solemnes de la Santísima Virgen María.


Despedida

Como Santa María de Nazaret, vayamos "sin demora" al encuentro del hermano necesitado, y llevémosle al mismo Jesús, Sol que nace de lo alto.


30 de mayo de 2018, miércoles de la semana VIII del Tiempo Ordinario.
(Última actualización de la entrada: 1°/08/23).
 

domingo, 27 de mayo de 2018

Letanías a la Santísima Trinidad






Un antiguo libro de oraciones, el Fasciculus Sacrarum Orationum et Litaniarum ad usum quotidianum Christiani hominis, ex sanctis Scripturis et Patribus collectus, de 1612, contiene el siguiente formulario de letanías a la Santísima Trinidad (pp. 141-155), que he querido transcribir, en un deseo de rescatar del olvido algunas piezas preciosas de la liturgia y de la piedad católicas:


LITANIAE AD SANCTISSIMAM TRINITATEM 

Oh, Santa Trinidad, óyenos
Oh, adorada Trinidad, escúchanos,

Dios Padre Celestial, ten piedad  (esta respuesta se repite en las siguientes invocaciones) 
Dios Hijo Redentor del mundo,
Dios Espíritu Santo,
Santa Trinidad un solo Dios,

Verdadera y Única Trinidad,
Única y suma Deidad,
Santa e indivisa Unidad,
Unidad en la Sustancia, Trinidad en las Personas,
Único e igual Poder,
Única y Coeterna Majestad,
Única e igual Gloria,
Una y Divina Trinidad,
Padre Creador,
Hijo Reparador,
Espíritu Santo Paráclito,
Padre Ingénito,
Hijo Unigénito,
Espíritu Santo de Ambos procedente,
Santa Trinidad, Única, Creadora y Gobernadora de todo,
Omnipotencia de Dios Padre,
Inescrutable Sabiduría de Dios Hijo,
Eficacísima Bondad del Espíritu Santo,
Una y Simple Divinidad,

Santo, Santo, Santo, Señor de los ejércitos,
Santo Dios, Santo Fuerte, Santo Inmortal,

Tú, en Quien vivimos, nos movemos y existimos,
Tú, en Quien, por Quien y para Quien todo existe,
Rey de los siglos, Inmortal e Invisible,
Dios de Abraham, Dios de Isaac, Dios de Jacob,
Tú, El que eras, El que eres y El que vendrás,
Padre, Hijo y Espíritu Santo, Único Dios, 

Senos propicio, perdónanos, Santa Trinidad,
Senos propicio, escúchanos, Santa Trinidad,

De todo mal, líbranos, Santa Trinidad   (esta respuesta se repite en las siguientes invocaciones)
De todo pecado,
De toda soberbia y pertinacia,
De toda avaricia y codicia,
De la gula y del amor al mundo,
De toda envidia y odio,
De toda mala voluntad,
De toda lujuria e injusticia,
De toda acedia y pusilanimidad,
De la maldición perpetua,
Por lo inexpugnable de tu omnipotencia,
Por la Majestad de tu gloria,
Por la grandeza de tu misericordia,
Por la abundancia de tu bondad,
Por lo inenarrable de tu caridad,
Por lo insondable de tus juicios,
Por la excelsitud de tu sabiduría y tu ciencia,
Por las riquezas de tu santidad,
En el Día del Juicio,

Nosotros, que somos pecadores, te rogamos, óyenos (esta respuesta se repite en las siguientes invocaciones)
Para que solo a Ti adoremos y sirvamos,
Señor y Dios nuestro,
Para que no tomemos tu Santo Nombre en vano,
Para que observemos y santifiquemos los días festivos de la Iglesia,
Para que obedezcamos y honremos a nuestros padres y superiores,
Para que no matemos al hermano ni de palabra ni de obra,
Para que no te ofendamos con la mente ni con el cuerpo,
Para que no hurtemos ni pequemos contra la justicia,
Para que no mintamos ni levantemos falso testimonio,
Para que no codiciemos los bienes del hermano ni lo envidiemos,
Para que te amemos con todo el corazón, con toda el alma y con todas nuestras fuerzas,
Para que por Ti amemos sinceramente al prójimo como a nosotros mismos,
Para que te dignes conducirnos a tu Visión beatífica,
Dios Engendrador, Dios Engendrado y Dios de Ambos Expirado,

Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo, haznos propicios al Padre
Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo, sé propicio a nosotros, los pecadores
Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo, danos tu Espíritu Santo

Oh, Santa Trinidad, óyenos
Oh, adorada Unidad, escúchanos

Señor, ten piedad
Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad

V. Bendito eres, Dios de nuestros padres.
R. Alabado y glorioso por los siglos.

V. Bendito eres, Señor, en el fundamento del Cielo.
R. Y alabado y glorioso y ensalzado por los siglos.

V. Que te bendigan tus ángeles y santos.
R. Que te alaben y glorifiquen por los siglos.

V. Que te bendigan el cielo, la tierra, el mar y cuanto en ellos hay.
R. Que te alaben y glorifiquen por los siglos.

V. Bendigamos al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo.
R. Alabémoslos y ensalcémoslos por los siglos.

V. Señor, suba a Ti mi oración.
R. Y llegue a Ti mi clamor.

Oraciones

Todopoderoso y Eterno Dios, que diste a tus siervos conocer la gloria de tu Eterna Trinidad y adorar la unidad y el poder de tu Majestad en la confesión de la verdadera fe, te rogamos que, creyendo firmemente en Ti, nos veamos libres de toda adversidad.

Dios, que amas y restituyes la inocencia, orienta a Ti el corazón de tus siervos, para que con fervor de espíritu, permanezcamos firmes en la fe y eficaces en las obras.

Dios todopoderoso y eterno, aumenta en nosotros la fe, la esperanza y la caridad, y para que merezcamos alcanzar lo que prometes, haznos amar lo que mandas.

Te rogamos, Dios, que concedas a tus fieles el perdón y la paz para que sean justificados de sus faltas y te sirvan con libre voluntad.

Dios todopoderoso y eterno, mira propicio nuestra enfermedad y extiende clementemente tu brazo majestuoso sobre nosotros,  para protegernos y sanarnos. Por nuestro Señor Jesucristo...

V. Bendigamos al Señor.
R. Demos gracias a Dios.

V. Que las almas de los fieles difuntos, por la misericordia divina, descansen en paz.
R. Amén.


27 de mayo de 2018, solemnidad de la Santísima Trinidad. Entrada dedicada a Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo.

 

jueves, 24 de mayo de 2018

Letanías de nuestro Señor Jesucristo, Sacerdote y Víctima


 


Las siguientes letanías son las que rezaba san Juan Pablo II en el seminario de Cracovia, su tierra natal. La Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos aprobó el texto en su original latino el 30 de mayo de 2013 (Prot. N 1050/11/L, in Notitiae, vol. 49, año 2013), n° 5-6, p. 236-247), junto con el de las letanías del Santísimo Sacramento. Más abajo, comparto también con el lector la traducción al español realizada por la Congregación para el Clero:


LITANIAE DE DOMINO NOSTRO IESU CHRISTO SACERDOTE ET VICTIMA
 I
A.

Kyrie, eleison

Christe, eleison

Kyrie, eleison 

Christe, audi nos

Christe, exaudi nos 
Vel B:

Pater de caelis, Deus, miserere nobis
Fili, Redemptor mundi, Deus, miserere nobis
Spiritus Sancte, Deus, miserere nobis
Sancta Trinitas, unus Deus, miserere nobis
II
Iesu, Sacerdos et Victima, miserere nobis
Iesu, Sacerdos in aeternum secundum ordinem Melchisedech, miserere nobis
Iesu, Sacerdos quem misit Deus evangelizare pauperibus, miserere nobis
Iesu, Sacerdos qui in novissima cena formam sacrificii perennis instituisti, miserere nobis
Iesu, Sacerdos semper vivens ad interpellandum pro nobis, miserere nobis
Iesu, Pontifex quem Pater unxit Spiritu Sancto et virtute, miserere nobis
Iesu, Pontifex ex hominibus assumpte, miserere nobis
Iesu, Pontifex pro hominibus constitute, miserere nobis
Iesu, Pontifex confessionis nostrae, miserere nobis
Iesu, Pontifex amplioris prae Moysi gloriae, miserere nobis
Iesu, Pontifex tabernaculi veri, miserere nobis
Iesu, Pontifex futurorum bonorum, miserere nobis
Iesu, Pontifex sancte, innocens et impollute, miserere nobis
Iesu, Pontifex fidelis et misericors, miserere nobis
Iesu, Pontifex Dei et animarum zelo succense, miserere nobis
Iesu, Pontifex in aeternum perfecte, miserere nobis
Iesu, Pontifex qui per proprium sanguinem caelos penetrasti, miserere nobis
Iesu, Pontifex qui nobis viam novam initiasti, miserere nobis
Iesu, Pontifex qui dilexisti nos et lavisti nos a peccatis in sanguine tuo, miserere nobis
Iesu, Pontifex qui tradidisti temetipsum Deo oblationem et hostiam, miserere nobis
Iesu, Hostia Dei et hominum, miserere nobis
Iesu, Hostia sancta et immaculata, miserere nobis
Iesu, Hostia placabilis, miserere nobis
Iesu, Hostia pacifica, miserere nobis
Iesu, Hostia propitiationis et laudis, miserere nobis
Iesu, Hostia reconciliationis et pacis, miserere nobis
Iesu, Hostia in qua habemus fiduciam et accessum ad Deum, miserere nobis
Iesu, Hostia vivens in saecula saeculorum, miserere nobis

Propitius esto! parce nobis, Iesu
Propitius esto! exaudi nos, Iesu
III

A temerario in clerum ingressu, libera nos, Iesu
A peccato sacrilegii, libera nos, Iesu
A spiritu incontinentiae, libera nos, Iesu
A turpi quaestu, libera nos, Iesu
Ab omni simoniae labe, libera nos, Iesu
Ab indigna opum ecclesiasticarum dispensatione, libera nos, Iesu
Ab amore mundi eiusque vanitatum, libera nos, Iesu
Ab indigna Mysteriorum tuorum celebratione, libera nos, Iesu
III
Per aeternum sacerdotium tuum, libera nos, Iesu
Per sanctam unctionem, qua a Deo Patre in sacerdotem constitutus es, libera nos, Iesu
Per sacerdotalem spintum tuum, libera nos, Iesu
Per ministerium illud, quo Patrem tuum super terram clarificasti, libera nos, Iesu
Per cruentam tui ipsius immolationem semel in cruce factam, libera nos, Iesu
Per illud idem sacrificium in altari quotidie renovatum, libera nos, Iesu
Per divinam illam potestatem, quam in sacerdotibus tuis invisibiliter exerces, libera nos, Iesu
V
Ut universum ordinem sacerdotalem in sancta religione conservare digneris, te rogamus, audi nos
Ut pastores secundum cor tuum populo tuo providere digneris, te rogamus, audi nos
Ut illos spiritus sacerdotii tui implere digneris, te rogamus, audi nos
Ut labia sacerdotum scientiam custodiant, te rogamus, audi nos
Ut in messem tuam operarios fideles mittere digneris, te rogamus, audi nos
Ut fideles mysteriorum tuorum dispensatores multiplicare digneris, te rogamus, audi nos
Ut eis perseverantem in tua voluntate famulatum tribuere digneris, te rogamus, audi nos
Ut eis in ministerio mansuetudinem, in actione sollertiam et in orationem constantia concedere digneris, te rogamus, audi nos
Ut per eos sanctissimi Sacramenti cultum ubique promovere digneris, te rogamus, audi nos
Ut qui tibi bene ministraverunt, in gaudium tuum suscipere digneris, te rogamus, audi nos

Agnus Dei, qui tollis peccata mundi, parce nobis, Domine
Agnus Dei, qui tollis peccata mundi, exaudi nos, Domine
Agnus Dei, qui tollis peccata mundi, miserere nobis, Domine

Iesu, Sacerdos, audi nos
Iesu, Sacerdos, exaudi nos.

Oremus

Ecclesiae tuae, Deus, sanctificator et custos, suscita in ea per Spiritum tuum idoneos et fideles sanctorum mysteriorum dispensatores, ut eorum ministerio el exemplo christiana plebs in viam salutis te protegente dirigatur. Per Christum Dominum nostrum. Amen.

Deus, qui ministrantibus et ieiunantibus discipulis segregari iussisti Saulum et Barnabam in opus ad quod assumpseras eos, adesto nunc Ecclesiae tuae oranti, et tu, qui omnium corda nosti, ostende quos elegeris in ministerium. Per Christum Dominum nostrum. Amen. 

 
Letanías de Nuestro Señor Jesucristo Sacerdote y Víctima (en español )

Señor ten piedad
Señor ten piedad

Cristo ten piedad
Cristo ten piedad 

Señor ten piedad
Señor ten piedad 

Cristo óyenos
Cristo óyenos 

Cristo escúchanos
Cristo escúchanos 

Dios, Padre celestial, ten piedad de nosotros
Dios Hijo, Redentor del mundo, ten piedad de nosotros
Dios, Espíritu Santo, ten piedad de nosotros
Trinidad Santa, un solo Dios, ten piedad de nosotros

Jesús, Sacerdote y Víctima, ten piedad de nosotros
Jesús, Sacerdote para siempre según el orden de Melquisedec, ten piedad de nosotros
Jesús, Sacerdote que Dios envió a evangelizar a los pobres, ten piedad de nosotros
Jesús, Sacerdote que en la Última Cena instituiste el Sacrificio perenne, ten piedad de nosotros
Jesús, Sacerdote siempre vivo para interceder por nosotros, ten piedad de nosotros
Jesús, Pontifice a quien el Padre ungió con el Espíritu Santo y la virtud, ten piedad de nosotros
Jesús, Pontífice entresacado de los hombres, ten piedad de nosotros
Jesús, Pontífice constituido a favor de los hombres, ten piedad de nosotros
Jesús, Pontífice de nuestra confesión, ten piedad de nosotros
Jesús, Pontífice más alto que la gloria de Moisés, ten piedad de nosotros
Jesús, Pontífice del verdadero tabernáculo, ten piedad de nosotros
Jesús, Pontífice de los bienes futuros, ten piedad de nosotros
Jesús, Pontífice santo, inocente y sin pecado, ten piedad de nosotros
Jesús, Pontífice fiel y misericordioso, ten piedad de nosotros
Jesús, Pontífice divino y lleno de celo por las almas, ten piedad de nosotros
Jesús, Pontífice de eterna perfección, ten piedad de nosotros
Jesús, Pontífice que por tu Sangre llegaste a los cielos, ten piedad de nosotros
Jesús, Pontífice que nos enseñaste un camino nuevo, ten piedad de nosotros
Jesús, Pontífice que nos amaste y que lavaste nuestros pecados con tu Sangre, ten piedad de nosotros
Jesús, Pontífice que te entregaste a Dios como Hostia de oblación, ten piedad de nosotros
Jesús, Hostia de Dios y de los hombres, ten piedad de nosotros
Jesús, Hostia santa e inmaculada, ten piedad de nosotros
Jesús, Hostia mansa, ten piedad de nosotros
Jesús, Hostia pacífica, ten piedad de nosotros
Jesús, Hostia de propiciación y de alabanza, ten piedad de nosotros
Jesús, Hostia de reconciliación y de paz, ten piedad de nosotros
Jesús, Hostia para llegar a Dios con toda confianza, ten piedad de nosotros
Jesús, Hostia viviente para siempre, ten piedad de nosotros

Sé propicio, ten compasión de nosotros, Jesús
Sé propicio, escúchanos, Jesús

Del temor a la vocación sacerdotal, líbranos, Jesús
Del pecado de sacrilegio, líbranos, Jesús
Del espíritu de lascivia, líbranos, Jesús
De los pensamientos impuros, líbranos, Jesús
Del pecado simoníaco, líbranos, Jesús
De la indigna dispensación del ministerio, líbranos, Jesús
Del amor al mundo y a sus vanidades, líbranos, Jesús
De la indigna celebración de tus Misterios, líbranos, Jesús
Por tu eterno sacerdocio, líbranos, Jesús
Por la santa unción con la que fuiste consagrado sacerdote por Dios Padre, líbranos, Jesús
Por tu espíritu sacerdotal, líbranos, Jesús
Por el ministerio con el que glorificaste a tu Padre, líbranos, Jesús
Jesús, por tu Sacrificio cruento hecho una vez para siempre, líbranos, Jesús
Por tu Sacrificio renovado cada día en los altares, líbranos, Jesús
Por aquella potestad tuya, que reviste invisiblemente a tus sacerdotes, líbranos, Jesús

Para que conserves en la santa religión a todo el orden sacerdotal, te rogamos, escúchanos
Para que los pastores apacienten tu grey según tu corazón, te rogamos, escúchanos
Para que los llenes de tu espíritu sacerdotal, te rogamos, escúchanos
Para que los labios sacerdotales proclamen tu ciencia, te rogamos, escúchanos
Para que envíes obreros que fielmente cultiven tu mies, te rogamos, escúchanos
Para que te dignes multiplicar los dispensadores de tus misterios, te rogamos, escúchanos
Para que perseveren siempre en tu voluntad, te rogamos, escúchanos
Para que perseveren en su ministerio con docilidad, sean prontos a donarse y constantes en la oración, te rogamos, escúchanos
Para que por ellos se promueva el culto al Santísimo Sacramento, te rogamos, escúchanos
Para que quienes han sido fieles al ministerio reciban el premio eterno, te rogamos, escúchanos

Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, perdónanos, Señor
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, escúchanos Señor
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros

Jesús, Sacerdote, óyenos
Jesús, Sacerdote, escúchanos

Oremos. 
Oh, Dios, Santificador y Guía de tu Iglesia, suscita en ella, mediante tu Espíritu, idóneos y fieles dispensadores de tus misterios, para que, bajo tu protección, con su ministerio y con el ejemplo, acompañen a todos los cristianos hacia el camino de la salvación. Por Cristo, nuestro Señor. Amén.

Oh, Dios, que mandaste escoger, entre aquellos discípulos que oraban y ayunaban, a Saulo y a Bernabé para el ministerio por ti escogido, haz lo mismo ahora con tu Iglesia orante y tú, que conoces nuestros corazones, muéstranos a quienes eliges para tu ministerio. Por Jesucristo Nuestro Señor. Amén.


24 de mayo de 2018, en algunos lugares, fiesta de Jesucristo, Sumo y Eterno Sacerdote. Entrada dedicada a Él.



Dedicación de la Basílica de San Francisco de Asís: himnos litúrgicos





Cada 24 de mayo, la Familia Franciscana celebra la "fiesta" de la Dedicación de la Basílica de San Francisco de Asís. Estos son los himnos litúrgicos propios:


Oficio de lectura

Piedra angular es tu cuerpo,
oh, seráfico Francisco,
la tumba, primera iglesia,
tú, la herencia de tus hijos.

Sobre ti, segunda iglesia
de virtudes adornada,
la humildad y la pobreza
celosamente guardadas.

Tercera iglesia de luz,
anticipo de la gloria.
En el monte Paraíso
las tres guardan tu memoria.

Gloria al Padre, Dios eterno,
gloria a su único Hijo,
gloria al Espíritu Santo
por los siglos de los siglos. Amén.


Laudes


Sobre el monte Paraíso
el templo de Dios se eleva,
como el fuego de la aurora,
a la tierra toda incendia.

Guarda celoso en sus muros
la riqueza de la herencia,
el principio del camino
de la humildad y pobreza.

Iglesia madre, anticipo
de la Iglesia celestial,
que en el cuerpo de Francisco
tiene su piedra angular.

Esperanza siempre nueva.
Sólo Cristo es su esplendor.
Impulso pleno naciente
de todo hermano menor.

Loado seas por siempre,
loado seas, mi Señor;
sé loado en este templo,
cuna de paz y de amor. Amén.

 
Vísperas

Loado, mi Señor, por los humildes,
que siguieron las huellas de tu Hijo,
loado por la gloria que mostraste
en Francisco, pequeño y pobrecillo.

Loado por el pobre y el que sufre,
y a tu trono lo elevas complacido,
por Francisco, llagado en alma y cuerpo,
en el que Cristo vuelve redivivo.

En quien fuera en la tierra hermano humilde
resplandece la gloria del Altísimo,
irradia su sepulcro bendiciones.
de tierra y cielos nuevos anticipo.

Su templo es hontanar de gozo y luz,
tesoro que nos deja enriquecidos,
lo levantó la Iglesia y lo bendice
con amor al más fiel de entre sus hijos.

Alegraos, hermanos, de tal padre,
por él load a Dios y bendecidlo,
ensalcemos su gracia generosa,
que nos hace su hogar y templo vivo. Amén.


24 de mayo de 2018, para los franciscanos, fiesta de la Dedicación de la Basílica de San Francisco de Asís.
Entrada dedicada al Poverello d´Assisi.

Jesucristo, Sumo y Eterno Sacerdote: himnos litúrgicos

 
 
 
 
El jueves que sigue a la solemnidad de Pentecostés. en algunos lugares se celebra la fiesta de Jesucristo, Sumo y Eterno Sacerdote. Cf. Decretum -Prot. N. 1040/11/L- a pag. 337- (19 del PDF), in Notitiae 551-552/2012. Los siguientes son los himnos litúrgicos propios aprobados por la Santa Sede para algunas Conferencias Episcopales hispanohablantes:


Oficio de lectura

A Ti, Jesús, te alaban las naciones;
que a tu Reino nos llevas,
y en Ti cobra esperanza nuestra súplica,
único Mediador de Cielo y Tierra.

Verbo de Dios, por Quien todo fue hecho, nacido de María;
Tú, la Hostia pura, santa, inmaculada,
que de ofrecerse a Dios, sola fue digna.

Ungido por el Padre, Jesucristo, Eterno Sacerdote,
reconcilias el Cielo con la Tierra:
los hombres y los ángeles te adoren.

Dios de Dios verdadero, igual al Padre,
por nosotros te ofreces
en sacrificio, y mueres por nosotros,
trocando en vida eterna nuestra muerte.

Clavado en Cruz, nos miras, te miramos,
crece el amor, la entrega.
Al Padre, en el Espíritu, Contigo,
eleva nuestro canto y nuestra ofrenda. Amén.

 

Laudes

Cantan a tu gloria, Cristo Sacerdote,
los Cielos y la Tierra:
a Ti que por amor te hiciste hombre,
y al Padre como Víctima te ofrendas.

Tu Sacrificio nos abrió las puertas,
de par en par, del Cielo;
ante el Trono de Dios, es elocuente
tu Holocausto en la Cruz y tu silencio.

Todos los sacrificios de los hombres
quedaron abolidos:
todos eran figuras que anunciaban
al Sacerdote Eterno, Jesucristo.

No te basta el morir, que quieres darnos
Alimento de vida:
quedarte con nosotros y ofrecerte
sobre el Altar: hacerte Eucaristía.

Clavado en Cruz nos miras, te miramos,
crece el amor, la entrega.

Al Padre, en el Espíritu, Contigo,
eleva nuestro canto y nuestra ofrenda. Amén

 
Vísperas

A Ti, Sumo y Eterno Sacerdote
de la Nueva Alianza,
se ofrecen nuestros votos y se elevan
los corazones en acción de gracias.

Desde el seno del Padre, descendiste
al de la Virgen Madre;
te haces pobre, y así nos enriqueces;
tu obediencia, de esclavos libres hace.

Tú eres el Ungido, Jesucristo,
el Sacerdote único;
tiene su fin en Ti la ley antigua,
por Ti la ley de gracia viene al mundo.

Al derramar tu Sangre por nosotros,
tu amor complace al Padre;
siendo la Hostia de tu Sacrificio,
hijos de Dios y hermanos Tú nos haces.

Para alcanzar la salvación eterna,
día a día se ofrece
tu Sacrificio, mientras, junto al Padre,
sin cesar por nosotros intercedes.

A Ti, Cristo Pontífice, la gloria
por los siglos de los siglos;
Tú que vives y reinas y te ofreces
al Padre en el amor del Santo Espíritu. Amén.


 
 
24 de mayo de 2018, en algunos lugares, fiesta de Jesucristo, Sumo y Eterno Sacerdote. Entrada dedicada a Él.

domingo, 20 de mayo de 2018

Letanías al Espíritu Santo




Un antiguo libro de oraciones, el Fasciculus Sacrarum Orationum et Litaniarum ad usum quotidianum Christiani hominis, ex sanctis Scripturis et Patribus collectus, de 1612, contiene el siguiente formulario de letanías al Espíritu Santo (pp. 124-137), que he querido transcribir, en un deseo de rescatar del olvido algunas piezas preciosas de la liturgia y de la piedad católicas:


LITANIAE AD SPIRITUM SANCTUM 


Señor, ten piedad
Cristo, ten piedad,
Señor, ten piedad,

Espíritu Santo, óyenos
Espíritu Santo, escúchanos
Espíritu Paráclito, escúchanos.

Dios Padre Celestial, ten piedad de nosotros (esta respuesta se repite en las siguientes invocaciones)

Dios Hijo Redentor del mundo,
Dios Espíritu Santo,
Santa Trinidad, un solo Dios,

Espíritu de verdad,
Espíritu de sabiduría, 
Espíritu de entendimiento,
Espíritu de fortaleza,
Espíritu de piedad,
Espíritu de recto consejo,
Espíritu de ciencia,
Espíritu de santo temor,
Espíritu caridad,
Espíritu de gozo,
Espíritu de paz,
Espíritu de paciencia,
Espíritu de benignidad,
Espíritu de bondad,
Espíritu de longanimidad,
Espíritu de mansedumbre,
Espíritu de fe y esperanza,
Espíritu de modestia,
Espíritu de continencia,
Espíritu de castidad,
Espíritu de humildad,
Espíritu de prudencia,
Espíritu de vida y salud,
Espíritu de todas las virtudes,
Espíritu de multiforme gracia,
Espíritu de adopción de los hijos de Dios,
Purificador de nuestras almas,
Santificador y Rector de la Iglesia Católica,
Escrutador de nuestras mentes y de nuestras conciencias,
Distribuidor de dones celestes,
Conocedor de las acciones y pensamientos de nuestros corazones,
Refugio seguro contra toda adversidad,
Dulzura de los que se dedican a servirte,
Poder de los que a Ti acuden,
Corona de la perfección,
Gozo de los ángeles,
Lámpara de los Patriarcas,
Inspirador de los Profetas,
Boca sabia de los Apóstoles,
Victoria de los Mártires,
Ciencia de los que viven su fe,
Pureza de las Vírgenes,
Unción de todos los santos,

Senos propicio, perdónanos, Espíritu Santo.
Senos propicio, escúchanos, Espíritu Santo.

De todo mal, líbranos, Espíritu Santo (esta respuesta se repite en las siguientes invocaciones)

De todo pecado,
De todas las tentaciones e insidias del Diablo,
De toda presunción y desesperación,
De la negación de la verdad conocida,
De la envidia de la gracia del hermano,
De toda obstinación e impenitencia,
De toda negligencia y torpeza,
De toda inmundicia de la mente y del cuerpo,
De todas las herejías y errores,
De todo mal espíritu,
De la muerte eterna,

Por tu eterna Procesión del Padre y del Hijo,
Por la prodigiosa Encarnación del Hijo de Dios de la que fuiste Artífice,
Por tu descenso sobre Cristo bautizado,
Por tu santa aparición en la Transfiguración del Señor,
Por tu Venida sobre los discípulos de Cristo,
En el Día del Juicio,

Nosotros, que somos pecadores, te rogamos, óyenos (esta respuesta se repite en las siguientes invocaciones)

Para que nos perdones,
Para que te dignes vivificar y santificar a los miembros de la Iglesia,
Para que te dignes congregar a todos los pueblos en la fe católica,
Para que te dignes, con la santa eficacia de tu gracia, prevenir, acompañar y llevar a buen término todo lo que emprendamos,
Para que te dignes otorgarnos los dones de la piedad  y de la oración verdaderas,
Para que te dignes santificar y orientar hacia Ti todos nuestros pensamientos, palabras y obras,
Para que te dignes acrecentar en nosotros la humildad y la virtud auténticas,
Para que te dignes aumentar en nosotros el empeño por la santa pobreza,
Para que te dignes plantar en nosotros los dones de la mansedumbre y la paciencia,
Para que te dignes concedernos la gracia de las lágrimas,
Para que te dignes hacernos aspirar constantemente a la auténtica justicia,
Para que te dignes inspirar en nosotros sentimientos sinceros de misericordia y caridad,
Para que te dignes crear en nosotros un espíritu nuevo y un corazón puro,
Para que te dignes conferirnos tranquilidad y paz genuinas,
Para que te dignes hacernos dignos y fuertes en las persecuciones toleradas por la justicia,
Para que te dignes confirmarnos en tu gracia,
Para que te dignes admitirnos en la Asamblea de tus elegidos, 
Para que te dignes escucharnos,
Espíritu de Dios, 

Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo, infunde en nosotros el Espíritu Santo.
Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo, envía a nosotros la Promesa del Padre: el Espíritu Santo.
Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo, danos el Espíritu Bueno.

Espíritu Santo, óyenos. 
Espíritu Santo, escúchanos,

Padrenuestro.

V. Envía, Señor, tu Espíritu, y serán creados.
R. Y renovarás la faz de la Tierra.

V. Crea en mí, Dios mío, un corazón puro.
R. Y renueva en mí tu Espíritu de rectitud,

V. No me escondas tu Rostro.
R. Y no apartes de mí tu Santo Espíritu.

V. Devuélveme la alegría de tu salvación.
R. Confírmame con tu Espíritu soberano.

V. La gracia del Espíritu Santo.
R. Ilumine nuestros sentidos y corazones.

V. Señor, escucha mi oración.
R. Y llegue a Ti mi clamor. 

Oraciones

Dios, que te dignaste ilustrar los corazones de tus fieles con la claridad del Espíritu Santo, concédenos que, animados por ese mismo Espíritu, sepamos juzgar y obrar con rectitud y disfrutemos siempre de sus celestiales consuelos. 

Señor, te rogamos que el Paráclito que de Ti procede nos ilumine y nos revele toda la verdad, según la promesa de tu Hijo.

Danos, Señor, la fuerza del Espíritu Santo que purifique nuestros corazones y nos libre de toda adversidad.

Dios, anhelo de todo corazón y voluntad, para Quien nada permanece en secreto, purifica nuestros pensamientos con la efusión de tu Espíritu Santo, para que amando lo que es perfecto, merezcamos alabarte dignamente.

Dios Todopoderoso y Eterno, cuyo Espíritu rige y santifica todo el Cuerpo de la Iglesia, escucha a los que te suplicamos desde cualquier parte, para que con el don de tu gracia, te sirvamos fielmente. Por nuestro Señor Jesucristo...

V. Bendigamos al Señor.
R. Demos gracias a Dios.

V. Que las almas de los fieles difuntos, por la misericordia divina, descansen en paz.
R. Amén.


20  de mayo de 2018, solemnidad de Pentecostés. Entrada dedicada a Dios Espíritu Santo.