La Orden de los Agustinos Recoletos celebra cada 19 de agosto la "memoria obligatoria" de san Ezequiel Moreno, obispo, y le dedica los siguientes himnos en la Liturgia de las Horas propia:
Oficio de Lectura
Padre y Pastor de almas, misionero
en los campos de Cristo y de su Iglesia,
ardiente como Pablo, iluminado
como Agustín, en caridad inmensa;
enséñanos de nuevo los secretos
de la humildad, y de la suprema ciencia
de vivir y morir por lo que amamos,
y, como tú, dejar sobre la tierra
la semilla del bien y la esperanza
de un mundo de justicia y de belleza.
Hermano nuestro, que nos precediste
por la gloriosa y dolorida senda
de predicar a Cristo con la vida
y con el testimonio de la prueba,
enséñanos el arte cotidiano
de transformar en dicha la experiencia
de las contradicciones de la vida.
Y háblanos de la fe, de la firmeza
en el servir a Dios y amar al hombre,
y cultivar la sed de la vida eterna.
Tu ejemplo nos ilustra, tu palabra
el mensaje de Cristo nos renueva.
Honor y gloria sean siempre dadas
a la Divina Trinidad que reina,
por los siglos de los siglos en las almas
y en el misterio de la Vida eterna. Amén.
Laudes
Cristo, que a Ezequiel en tu gozo eterno
diste corona de virtud insigne,
las alabanzas que en su honor te damos
propicio acoge.
Él fue pastor, que de Pasto el rebaño
libró del lobo carnicero, y siempre
con tu Palabra de verdad y Vida
nutrió sus almas.
Y, como tú, a la oveja descarriada
buscó por riscos, y en sus mansos hombros
volvió al redil para recuperarle
tu amor sin tregua.
Cristo, Pastor Divino de las almas,
que salvación para nosotros quieres,
danos pastores que, como tú, hablen
de luz y vida.
Gloria perenne sea siempre dada
a la Divina Trinidad gloriosa,
que a Ezequiel, claro imitador de Cristo,
colmó de gloria. Amén.
Vísperas
Santo varón, que el buen olor de Cristo
difundiste a tu paso, y tu vivir
fue todo en Cristo, y en tu vida el signo
llevaste de Agustín.
A ti acudimos los que navegamos
hacia la Patria por incierto mar,
por donde tú hacia Cristo tantas almas
supiste encaminar.
Tu celo ardiente, tu palabra ungida,
almas y pueblos ganaron para Dios;
operario de Cristo, acrecentaste
la viña del Señor.
Padre y maestro, por Ti glorificamos
a la adorable y Santa Trinidad;
sea tu vida luz para nosotros
y testimonio fiel de la verdad,
y, en Cristo vinculados, ensanchemos
de Cristo la heredad. Amén.
24 de agosto de 2017, fiesta de san Bartolomé, apóstol.
IV Centenario de la muerte terrena de santa Rosa de Lima, virgen. Patrona de América Latina. Entrada dedicada a ellos y a san Ezequiel Moreno.
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