Esta Misa no puede celebrarse en la solemnidad de Santa María, Madre de Dios, el día 1 de enero.
A
Antífona de entrada Cf. Eclo 36, 18-19
Concede la paz, Señor, a los que esperan en ti;
escucha la oración de tus servidores
y guíanos por el camino de la justicia.
Oración colecta
Dios nuestro,
que llamaste hijos tuyos a los que trabajan por la paz,
concédenos la gracia de procurar, sin cesar, la justicia,
única garantía de una paz sólida y verdadera.
Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo,
y es Dios, por los siglos de los siglos.
O bien:
Señor Dios, que con cariño de Padre cuidas de los hombres,
a quienes diste un único origen;
concede que todos formen una sola familia
y vivan en paz, unidos por el amor fraterno.
Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo,
y es Dios, por los siglos de los siglos.
Otras oraciones (B).
Oración sobre las ofrendas
Padre, te pedimos
que el sacrificio salvador de tu Hijo, Rey de la paz,
ofrecido bajo estos signos sacramentales
que expresan la paz y la unidad,
sirva para afianzar la concordia entre todos tus hijos.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Antífona de comunión Mt 5, 9
Felices los que trabajan por la paz,
porque serán llamados hijos de Dios.
O bien: Cf. Jn 14, 27
Dice el Señor: Les dejo la paz, les doy mi paz.
Oración después de la comunión
Concédenos, Padre, tu espíritu de amor,
para que, renovados por el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo único,
trabajemos eficazmente para promover,
entre todos los hombres, la paz que él mismo nos dejó.
Que vive y reina por los siglos de los siglos.
B
Otras oraciones por la paz
Oración colecta
Dios, creador del mundo,
bajo tu providencia transcurre la historia de los hombres;
escucha con bondad nuestras súplicas
y concede la paz a nuestro tiempo,
para que nos gocemos incesantemente
en la alabanza de tu misericordia.
Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo,
y es Dios, por los siglos de los siglos.
O bien:
Dios de la paz, más aún, la paz misma;
el hombre violento no te comprende,
y el corazón cruel no te acepta;
concede perseverar en el bien a quienes viven en tu paz,
y que los enfrentados se reconcilien, desistiendo de todo mal.
Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo,
y es Dios, por los siglos de los siglos.
También puede utilizarse la Misa para pedir la concordia.
14 de julio de 2021, memoria litúrgica de san Camilo de Lelis, presbítero.
Entrada dedicada a él.
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